Sistema endocannabinoide
La clave para equilibrar tu cuerpo y mejorar tu salud
2023-10-26
A lo largo de la historia de la humanidad los seres humanos han tomado de la tierra frutos y plantas para alimentarse o mejorar sus condiciones de salud. Una de estas plantas es la de Cannabis Sativa, que ha sido usada por los seres humanos con diferentes objetivos desde rituales y espirituales, hasta alimento, vestido y uso medicinal.
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El sistema endocannabinoide (SEC) es un sistema biológico que se encuentra en el cuerpo humano y en muchos otros animales. Su nombre proviene de la planta de cannabis, ya que fue durante la investigación de los efectos de esta planta en el cuerpo humano que se descubrió este sistema. El SEC desempeña un papel crucial en la regulación de una variedad de procesos fisiológicos y funciones del cuerpo.
El sistema endocannabinoide está compuesto por tres componentes principales:
- Receptores: Los receptores cannabinoides se encuentran en toda la superficie del cuerpo y en el cerebro. Los dos tipos principales de receptores son CB1 y CB2. Los receptores CB1 se encuentran en el sistema nervioso central, mientras que los receptores CB2 se encuentran principalmente en el sistema inmunológico.
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Endocannabinoides: Son compuestos químicos producidos por el propio cuerpo que se unen a los receptores cannabinoides. Los dos principales endocannabinoides son la anandamida y el 2-araquidonoilglicerol (2-AG).
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Enzimas: Las enzimas son responsables de la degradación de los endocannabinoides una vez que han cumplido su función.
Para la comprensión de este sistema, revisaremos la historia del descubrimiento de los compuestos de la planta de Cannabis, con el objetivo de acercarnos a las implicaciones que tiene este descubrimiento tanto para la salud como para la medicina.
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En el siglo XIX se empezaron a identificar y a aislar los compuestos activos del Cannabis. El primer compuesto en ser identificado fue el Cannabinol CBN en el año 1899 por parte de los científicos Thomas Wood, W. T Spivery y Thomas Easterfield quienes lo aislaron de muestras de hachís.
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Posteriormente, en los años 40 ́s del siglo XX, el químico estadounidense Roger Adams logró aislar el Cannabidiol CBD importante compuesto del cannabis para usos medicinales. Lastimosamente, su descubrimiento pasó desapercibido hasta la década de los 60´s.
En el año 1964 un grupo de investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén, liderados por el Dr. Raphael Mechoulam, logran identificar y aislar el Cannabigerol CBG, cannabinoide de vital importancia para la síntesis de la gran mayoría de cannabinoides, ya que de él se derivan el resto de los compuestos presentes en la planta.
Ese mismo año el profesor Mechoulam junto al investigador Yehial Gaoni, identifican y logran aislar el Delta 9 Tetrahidrocannabinol THC, importante componente del Cannabis responsable de los efectos psicoactivos de la planta.
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Dos años después, en 1966 Mechoulam y Gaoni logran aislar el Cannabicromeno CBC.
Tras identificar los compuestos activos de las plantas de cannabis, se continuó estudiando los efectos que generan estos compuestos en los organismos vivos. En 1988 se produce un gran avance, los científicos de la escuela de medicina de St Louis en Estados Unidos, descubren que en el cerebro de las ratas existen sitios o receptores que son activados por el THC.
Además, observan que hay moléculas de proteínas especializadas incrustadas en las membranas celulares que denominaron receptor CB1, el cual resultó ser mucho más abundante en el cerebro de los mamíferos que cualquier otro receptor de este tipo.
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A partir de la interacción del THC con los receptores CB1 se producen los efectos de este compuesto del Cannabis en las ratas, este receptor recibe exclusivamente sustancias de este tipo de cannabinoide.
La conclusión a la que los investigadores llegaron fue que, si existe un receptor exclusivo para sustancias cannabinoides provenientes de las plantas de Cannabis Sativa, es muy probable que nuestro organismo produzca sustancias similares.
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Basados en esta hipótesis se continuaron estudiando los efectos del Cannabis en los seres vivos; en 1992 los investigadores de la Universidad Hebrea de Israel, liderados por Raphael Mechoulam junto con Lumir Hanus y William Devane, logran identificar la n-araquidonil etanolamina, primer neurotransmisor endocannabinoide, que interactúa con los receptores CB1 cerebrales, lo denominaron Anandamida, palabra derivada del sánscrito, que significa “felicidad”, lo que sugiere que tiene efectos sobre el estado de ánimo, aunque el THC y la anandamida no tienen estructuras moleculares similares, interactúan de manera similar con los receptores CB1.
Las investigaciones continuaron y al año siguiente en 1993 se publicó, en la revista científica Nature, el descubrimiento del receptor CB2 presente sobre todo en el sistema nervioso periférico y el sistema inmune, dando nuevas luces en la señalización del sistema endocannabinoide. Este receptor juega un papel importante en la modulación de la inflamación y el funcionamiento del sistema inmune.
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Dos años más tarde, en 1995 el Dr. Mechoulam al igual que científicos japoneses, identifican otro endocannabinoide que denominaron 2-araquidonilglicerol o 2-AG por sus siglas, descubren que este endocannabinoide en comparación con la anandamida es más potente, más frecuente y más ampliamente expresado en todo el cuerpo. Los endocannabinoides son producidos y destruidos por un grupo de diferentes enzimas.
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En 1996 se descubrió la hidrolasa de ácidos grasos o FAAH por parte de Ben Cravatt en el Instituto de Investigación Scripps, y un año más tarde en 1997, científicos italianos identificaron la monoacilglicerol lipasa o MAGL. La primera, se encarga de degradar la anandamida y la segunda, es la enzima que degrada la 2-AG, estas enzimas modulan el tono endocannabinoide al regular los niveles de Anandamida y 2-AG
En 1998 aparece en una publicación del European Journal Of Pharmacology del profesor S. Ben Shabat y otros investigadores el término “efecto séquito” o “efecto entourage”.
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Este término hace referencia a que los efectos de los fitocannabinoides no ocurren de forma aislada, se articulan y autoregulan con las otras sustancias presentes en el cannabis, por ejemplo, los terpenos, flavonoides y fitocannabinoides menores; al interactuar entre sí, el potencial de modulación sobre el sistema endocannabinoide es más contundente y completo que cuando usamos cannabinoides aislados, ejemplo de ello es solo THC o solo CBD, sin las otras sustancias.
Como hemos visto en este recorrido histórico y académico, el proceso de descubrir los compuestos medicinales de la planta de Cannabis Sativa y el sistema endocannabinoide ha tomado años de investigación científica y ha sido el resultado de los aportes de muchos investigadores en diferentes lugares del mundo.
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¿Para qué sirve entonces este descubrimiento y qué aporte tiene para la medicina?
La función del sistema endocannabinoide más importante en la salud humana es el mantenimiento de la homeostasis o el equilibrio en el organismo, involucrando una serie de sistemas de autorregulación presentes en el cuerpo, para optimizar los procesos vitales que sostienen biológicamente la vida tales como:
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Ciclo circadiano asociado al sueño y la vigilia.
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Regulación de los niveles de azúcar en la sangre a partir de modular los niveles de glucosa e insulina que, a su vez, controlan el apetito y la saciedad.
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Distribución de la grasa corporal regulando el metabolismo del colesterol y los ácidos grasos.
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Regulación del estado de ánimo y las emociones.
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Funcionamiento de todos los ejes neuroendocrinos relacionados con la actividad de la tiroides.
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La función de las gónadas.
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Actividad de las glándulas suprarrenales.
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Modulación del sistema de control de la tensión arterial.
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El sistema renina-angiotensina aldosterona.
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Funcionamiento del sistema de señalización celular y el sistema neuro inmuno endocrino.
El SEC a partir de la comunicación con todos los sistemas de nuestro organismo, sincroniza sus funciones y garantiza que exista una armonía.
Gracias a estos descubrimientos los países se han visto obligados a crear un marco regulatorio para el uso medicinal de esta planta, que ha sido estigmatizada bajo la ilegalidad.
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La efectividad de los tratamientos médicos a base de Cannabis está asociado a la interacción de las sustancias presentes en las plantas de cannabis, no solo los fitocannabinoides, si no de los terpenos, flavonoides y cannabinoides menores con nuestro sistema endocannabinoides.
Si quieres beneficiarte de los efectos terapéuticos y medicinales de esta planta, en Clinicannabis contamos con médicos especialistas en este enfoque médico para cuidar de ti, modulando y equilibrando tu sistema endocannabinoide y poder aliviar el dolor.
Escrito por: Dr. Andrés Daniel Archer Juri
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